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DESPEDIDAS

Gracias por lo vivido

Sí, nuestros ciclos empiezan, se desarrollan y acaban. A veces de una forma más natural y otras veces más inesperada, pero la muerte forma parte de la Vida.

Cuando alguien marcha, parece que algo muere dentro de nosotros, y surge el dolor, la sensibilidad, la fragilidad, la vulnerabilidad y en muchas ocasiones las preguntas.

Especialmente este tipo de ceremonias son para vosotros si queréis hacer algo más acorde a lo que vuestro ser querido hubiera deseado y más afin a vosotros,  al grupo más cercano que lo despedís.

Esta ceremonia puede ser más social o más íntima según lo prefiráis y no tiene por qué sustituir a la ceremonia religiosa si así  lo estimas.

Mujer sonriendo

Honrando la vulnerabilidad

Primero quiero escucharte, quiero escucharos, conocer vuestra historia con él/ella, quiero ponerme enfrente de mi propia sensibilidad al sentiros.

Más allá de las propias creencias que tengas sobre la Vida y la Muerte queremos honrar lo que ocurre en nosotros, queremos honrar la Vida compartida con nuestro ser querido. 

Por eso ésto también es una celebración, con el dolor como invitado pero no como protagonista.

Buscamos una ceremonia más viva, más humana, más personal, más participativa.

 

Manos jóvenes, tenencia, viejo, manos

Desde aquí veremos todos los motivos que tenemos para agradecer, para honrar y buscaremos los gestos y símbolos que le den sentido a esta despedida.

Algunos de ellos pueden ser:

  • Dedicarle una canción

  • Realizar una urna de gratitud, repartiendo papeles para todos los que quieran expresar su motivo de gratitud

  • Dibujar con flores una frase dedicada

  • Leerle una carta de agradecimiento

  • Traerle aquello que sabes a él/ella le gustaría estuviera en este momento

  • Bailar su canción preferida

  • Recitarle un poema

  • Dar un paseo en ese lugar tan especial junto a él /ella.

Una ceremonia de Vida

Oficiaré la ceremonia desde el respeto y la sensibilidad, pero también desde la gratitud y vida, recogiendo todo lo que quiere expresarse y dando espacio a estos gestos simbólicos que nos ayuden a despedirnos de una forma más amorosa.

También te puedo acompañar en tu proceso de duelo de una forma más íntima si así lo necesitas. 

Si sientes que te puedo acompañar a despedirte, mi corazón está abierto.

Precio a partir de 200 en función de desplazamientos, accesorios y complejidad requerida

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